Tiempo estimado: 4 - 5 horas
Longitud: 9,8 km.
Dificultad: Media
Ruta que discurre por dos de los rincones más escondidos, a pesar de estar cerca de Mirones y Liérganes y menos visitados del Territorio Meracho.
Durante esta ruta el visitante tendrá la sensación de volver a un pasado cercano en el que los merachos pasaban los veranos intentando aprovechar al máximo cada palmo de hierba, sustento de sus animales, en este entorno de garmas y peñascos.
La ruta discurre por caminos y sendas encachadas que parece increíble con el paso del tiempo que pudiesen ser construidas por nuestros antepasados. Si uno permanece atento podrá descubrir las "traídas de agua" que ingeniaban para tener agua durante el verano con los que dar de beber al ganado, en estos inhóspitos rincones.
Como en otra ocasiones comenzamos la ruta en Mirones para subir rápidamente a su barrio de arriba. La Cantolla. Si se prefiere, también se puede dejar el coche directamente en La Cantolla e iniciar aquí la ruta.
Comenzaremos siguiendo la ruta del PR-73 que nos lleva al macizo de Las Enguinzas. En su primera parte, el primer kilómetro aproximadamente discurre por una pista de hormigón con un duro desnivel hasta alcanzar la traída de aguas vallada que nos encontraremos a nuestra izquierda (no confundir con la primera que encontramos).
Nada más superar este enrejado encontraremos un sendero encachado a nuestra izquierda por el que nos desviaremos.
Desvío a la izquierda |
A apenas 300 metros nos encontraremos una cabaña a nuestra derecha. Nada más superarla debemos seguir por un sendero a nuestra izquierda, como se muestra en la foto inferior, que nos conducirá a Cantal. Si seguimos a nuestra derecha iremos a La Ballosera por donde regresaremos, aunque existe la posibilidad de hacer la ruta en el sentido contrario.
Cruce hacía Cantal |
Mirada atrás a Mirones y Porracolina |
Cantal |
Nos perdemos por sus cabañas y seguimos el camino hasta subir de nuevo a un nuevo collado en el que encontraremos una vieja fuente. El camino se ensancha entre las faldas de Castrejon a nuestra izquierda y Peña Pelada a nuestra derecha.
Fuente Cantal |
Aquí comenzamos a rodear Peña Pelada siempre hacía nuestra derecha y como decíamos sin perder altura buscando el sendero que la rodea a los pies de sus paredes. Por el camino iremos viendo canales que nos llevan a su cima, aunque no recomendamos desviarse por ellas porque nos podemos meter en alguna garma que pueden meternos en algún lío.
Como decíamos poco a poco iremos dando vista a Liérganes, Peña Cabarga y la Bahía.
Liérganes y la Bahía de Santander |
Seguimos el sendero hasta llegar a lo que queda un ocalital. Desde donde podremos seguir camino hacia La Ballosera o subir a Peña Pelada si es que nos decimos por alargar la marcha.
Aquí os mostramos el camino de subida a Peña Pelada que debéis seguir en este punto si queréis llegar a su cumbre.
Subida a Peña Pelada |
Seguimos camino hasta alcanzar el pequeño collado al fondo que nos mete directamente en sendero de La Ballosera. No tendréis perdida entre otras cosas porque encontraréis señales de un PR (blancas y amarillas) que une Liérganes y Mirones.
PR que atraviesa La Ballosera |
Sendero La Ballosera |
Sendero La Ballosera |
Sendero La Ballosera |
La Ballosera, al fondo Porracolina |
De nuevo nos dejamos llevar por la preciosidad de estos lugares, sus cabañas y sus "traídas de agua" o sumideros para recoger el agua para el verano.
Hasta alcanzar un collado que nos saca de La Ballosera y de nuevo nos devuelve a la realidad, dando vista a Mirones donde finalizaremos nuestra ruta.
Vista a Mirones |
Como siempre podéis consultar y descargaros la ruta para vuestro GPS en nuestra página de wikiloc, en el siguiente enlace: Ruta Cantal y La Ballosera.
También podéis consultar nuestra ruta a Peña Pelada que atraviesa La Ballosera donde encontraréis más detalles.
También podéis consultar nuestra ruta a Peña Pelada que atraviesa La Ballosera donde encontraréis más detalles.
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